“NUNCA TE OLVIDES DE SONREÍR PORQUE EL DÍA QUE NO SONRÍAS SERÁ UN DÍA PERDIDO” (CHARLES CHAPLIN)
2014
Los seres humanos nos reímos desde los 4 meses. Es un acto instintivo, natural que beneficia nuestra salud. Al reírnos mostramos los dientes. Es un acto que hemos heredado de nuestros antepasados, los primates. Los gorilas sonríen si están jugando. Así muestran su amistad. Cuando enseñan los dientes a sus compañeros, les están explicando que no tienen intención de atacarles.
Sonríe, por favor.
Sonreír es muy importante en nuestra vida. Algunos pacientes toman nota de risoterapia contra la diabetes o el colesterol.
En una prueba realizada a 300 personas, se demostró que viendo películas estresantes sus vasos sanguíneos se contraían afectando al flujo de la sangre. Sin embargo, cuando veían comedias, el tamaño de las vasos aumentaba y los órganos y tejidos del cuerpo humano recibían más oxígeno gracias a la sangre que les llegaba.
Además, reír sirve para superar la ansiedad y depresión, reduce el estrés, aumenta la creatividad y nos permite ser más receptivos. Nos convierte en personas más abiertas y contribuye a mejorar la imagen que proyectamos de nosotros mismos.
Ortodoncia, ¿cuándo?
La sonrisa te identifica como uno de tus rasgos distintivos. Los cánones de belleza actuales incluyen dientes blancos y bien alineados. La ortodoncia es la rama de la Odontología que se ocupa de estudiar, prevenir, diagnosticar, y corregir las anomalías dentales.
Hoy es muy fácil enderezar los dientes apretados, irregulares, salientes… Puede hacerse a cualquier edad, incluso de adultos. El momento óptimo para empezar a prevenir es cuando ya han salido todos los dientes definitivos o están a punto de hacerlo. O sea, a partir de los 6 años.