“Cazador de Sonrisas”
2014
Agustín Ferrer acaba de publicar en Grafito Editorial “Cazador de Sonrisas”, un cómic con un dentista como personaje principal ambientado en la Norteamérica de los años 60.
Tras la presentación del cómic en Pamplona, el pasado 8 de noviembre, Ferrer trae consigo 6 originales del cómic y 6 hojas en DIN A4 en acuarela, donde apreciamos el detalle y virtuosismo de este genial creador.
¿A qué te has dedicado hasta ahora?, ¿Cómo acabas dedicándote al cómic?
Comencé a estudiar arquitectura en Pamplona y al comenzar 5º decidí dejarlo. A pesar de ello acabé arquitectura técnica y estuve varios años dedicándome a la docencia. Más tarde empecé a trabajar en un estudio de arquitectura y aguanté hasta 2011 y digo “aguanté” porque me cansé de la profesión. Mientras tanto ya había probado esto del cómic. Comenzó a interesarme en una asignatura de la facultad, hice un cómic, comencé a ganar premios y… hasta que presenté el cómic a Grafito Editorial y aquí está.
Algo hemos oído de los premios, son numerosos pero ¿de cuál guardas mejor recuerdo?
Efectivamente, tengo unos 30 y el que guardo con más ilusión es el primero. Se trata de un cómic sobre animales antropomorfizados. Precisamente era un concurso sobre el canon de belleza convocado por los cirujanos plásticos.
Parece que te va el mundo médico… ¿En qué te has inspirado para crear “Cazador de Sonrisas”?
En los años 90 escuché una noticia en la que un dentista de Florida dejó, entre sus últimas voluntades, mención expresa de que sus pacientes se hicieran la prueba del VIH. Esto me hizo pensar en manos de quién nos ponemos y fue el germen de “Cazador…” aunque el cómic va por otros derroteros y no creo que sean así los dentistas.
¿Y para recrear las consultas? ¿Para dibujar esos sillones de los años 60?
La verdad que he tirado mucho de internet y de enciclopedias. De ahí que sean bastante realistas.
Vemos que estos años te inspiran. Tienes otro cómic, “Las apasionantes lecturas del Sr. Smith” ambientado en los 60.
Sí, es una época que me gusta. Por su colorido, por lo que transmite… “Cazador de Sonrisas” es anterior al “Sr. Smith” pero éste se publicó primero.
¿Hay algo de cosecha propia en “Cazador de Sonrisas”?
No, para nada. Ni he llevado ortodoncia, ni he tenido malas experiencias en el dentista. Más bien al contrario. Simplemente quería dotar al personaje de un puntillo retorcido, que es lo que atrae a los lectores, lo que hace que te quedes con ganas de más. No hubiera tenido sentido hacer una historia blanda.
Y ¿qué te parece si te decimos que es una buena historia para llevar al cine?
Estaría encantado! Yo tengo la historia y ellos los actores, los decorados, los coches de esos años… Incluso ya me han sugerido el actor. Se ha mencionado a Kevin Spacey como el adecuado porque interpretaría muy bien un personaje de buena persona pero con un trasfondo oscuro.
¿Qué nos vamos a encontrar en “Cazador de Sonrisas”?
La historia trata sobre el dentista Herbert F. Dunne, , marido ejemplar, buen padre… a pesar de su falta de empatía por el dolor ajeno, lo que no quiere decir que no sea un buen profesional. Precisamente muchas veces esa falta de empatía hace que el profesional se distancie y pueda terminar su tratamiento pase lo que pase o sienta lo que sienta su paciente. Luego ocurren más cosas. Eran los primeros años de drogas de diseño… no voy a dar más pistas
¿Recomendaría a los dentistas leer el cómic?
Por supuesto! Seguro que les saca una sonrisa. Creo que no sería muy recomendable tenerlo en la sala de espera pero estoy seguro que ellos lo entenderán porque es un humor “muy de dentistas”.
¿Y a los pacientes?
A los adultos, ya que el cómic está dirigido a un público adulto y, pese a esta imagen que se transmite, animo a todos los lectores a que sigan confiando en sus dentistas. Esto sólo es una ficción, un personaje al que seguro cogen cariño.