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Antes y después
¿Qué es un blanqueamiento?
Un blanqueamiento dental es un tratamiento que aclara el color de sus dientes.
¿Por qué es necesario?
Con la edad, los dientes se colorean por el consumo de algunas sustancias (té, café, vino tinto, tabaco, zumos de frutas, etc), o bien por traumatismos o bien debido a antiguas restauraciones (empastes). El blanqueamiento dental permite eliminar esta coloración y devolver la blancura natural a sus dientes.
¿Es un tratamiento seguro?
La duración viene determinada por el tipo de tratamiento, de una hora a varios días. Se reflejará una visible diferencia del color a partir de los primeros días. Se reflejará una visible diferencia a partir de los primeros días.
¿El resultado es duradero?
La duración del tratamiento dependerá de la higiene bucal del paciente asío como de sus hábitos alimentarios. Realizar un recordatorio cada 2 años, le permitirá mantener el color blanco y brillante de sus dientes.
Modo de aplicación:
Realizaremos una impresión de sus dientes con la finalidad de elaborar sus férulas personalizadas, proporcionándole el tratamiento que mejor se adapte a sus necesidades e indicándole los pasos a seguir para optimizar el resultado.
Para más información consulte en nuestra clínica.
La higiene dental es un acto fundamental en el cuidado de la salud y también en la prevención de enfermedades graves como son las enfermedades cardiovasculares, enfermedades respiratorias o incluso el cáncer.
El dentista busca posibles caries durante los chequeos regulares, pero también examina inicios de cáncer de boca al mismo tiempo. 10.000 personas sólo en EEUU padecen cáncer oral, de garganta, amígdalas o faríngeos.
Desde la Asocación Dental Americana se resaltan siete factores de riesgo para el cáncer oral:
1.- Género: Los hombres son dos veces mas propensos a padecer cáncer oral. Se asocia al mayor consumo de alcohol, comida y tabaco, pero cada vez más tiene que ver el cáncer oral asociado a la infección del virus del papiloma humano.
2.- Edad: El riesgo de cáncer oral aumenta sobre todo a partir de los 44 años. A los 62 años es cuando se suele detectar
3.- Tabaco. Su consumo aumenta el riesgo de forma dramática. Si se fume en pipa aumenta el riesgo de desarrollar cáncer en los labios. Cuando se mastica tabaco el cuerpo se expone a tener más riesgo de sufrir cáncer de mejillas, encías y labios.
4.- Alcohol : 7 de cada 10 pacientes de cáncer oral son grandes bebedores, según la asociación. ¿Qué es beber mucho? Según la asociación americana para las mujeres una copa al día y para los hombres más de dos.
5.- HPV: El virus del papiloma humano es una enfermedad transmitida sexualmente y se asocia ahora con 10.000 casos de cáncer orofaríngeo en EEUU. En España los expertos alertan del incremento de casos. Suelen ser las personas jóvenes.
6.- Luz Solar: Los trabajadores expuestos al sol son más propensos a desarrollar cáncer de labios.
7.- Dieta: Una nutrición pobre también sube las probabilidad de padecer un cáncer oral. Hay que vigilar el consumo de frutas y vegetales.
Fuente: http://noticias.lainformacion.com/
¿Qué son los diastemas y cómo se tratan?
Un “diastema” es una separación extraordinariamente grande entre dos o más dientes. La mayoría de las veces, el diastema aparece entre los dos dientes delanteros superiores. Muchos niños tienen diastema cuando se les caen los dientes de leche, pero en la mayoría de los casos esta distancia desaparece cuando salen los dientes permanentes.
Los diastemas pueden deberse a una diferencia en los tamaños de los dientes, a la falta de algún diente o a que el frenillo labial sea demasiado grande. El frenillo labial es el tejido que va desde el interior del labio hasta la encía, en el lugar donde se sitúan los dos dientes delanteros superiores. Los diastemas también pueden deberse a problemas en la alineación de la boca, como la sobremordida horizontal o la protrusión de los dientes1.
¿Cómo se puede tratar?
El tipo de tratamiento se decide una vez su dentista o especialista haya determinado la razón por la que tiene usted el diastema. Algunas de las opciones son:
- Conservar el diastema.
- Realizar un tratamiento ortodóncico para mover los dientes y cerrar el diastema.
- Ponerse unas carillas de porcelana, (unas láminas muy finas de porcelana cementada o composite adherido) en la parte exterior de los dientes.
- Utilizar coronas y puentes, o sustituir los dientes con implantes (sólo para adultos).
Si su frenillo labial es demasiado grande, puede que le remitan a un especialista para someterse a un procedimiento quirúrgico llamado frenectomía. Este procedimiento consiste en cortar el frenillo y volverlo a colocar para permitir que tenga más flexibilidad. Cuando la frenectomía se realiza en un niño, el espacio puede llegar a cerrarse por sí solo. Si se trata de un adolescente o un adulto, puede que sea necesario cerrarlo con ortodoncia. Es esencial acudir al dentista para saber cuál de estas opciones es la adecuada en su caso.
